No necesitas Motivación. Primero comienza lo que necesitas comenzar.
Creemos que la motivación y la fuerza de voluntad son las claves para iniciar una actividad y si no las consigues no podrás empezar y avanzar.
La motivación y la fuerza de voluntad están sobrevaloradas.
La ciencia ha demostrado sistemáticamente que nuestro nivel de motivación en un día varía entre altos y bajos por lo que no podemos estar esperando el gran salto para iniciar algo. Tenemos que buscar un sistema que nos permita empezar y progresar sin tener que depender de esta.
La mejor manera de iniciar una tarea que quiero realmente hacer es iniciar. Una vez que haces tu primer pequeño inicio comienzas a formar un ciclo virtuoso que generará la motivación y la fuerza de voluntad. Esos pequeños progresos y éxitos crearán la motivación para continuar e impulsarán tu confianza.
Los grandes objetivos están hechos de sub-objetivos que tienen sus tareas y metas muy bien definidas y esas tareas deben avanzarse con pequeños progresos y pequeños éxitos.
Cuando transformamos nuestro gran objetivo en sub-objetivos y bajándolos a tareas específicas que vamos avanzando semana a semana es cuando comenzamos a generar la posibilidad de conseguir el gran objetivo o gran sueño. Implementar un sistema que me permita ritualizar este trabajo semana a semana produce un ciclo positivo donde la motivación y la fuerza de voluntad ya no se necesitan para comenzar cada día.
Este sistema en definitiva es un conjunto de hábitos que se entrelazan. Pero siempre con pequeños pasos que van generando progreso.
Tendemos a pensar mucho en el gran objetivo o sueño y quedarnos ensoñando, que si bien en el cortísimo plazo genera placer como si hubiéramos conseguido el resultado que soñamos, luego todo se cae ya que no hemos realizado nada. Y aparece la tristeza, ansiedad y decaimiento.
Este sistema que vemos en el gráfico de más arriba aplica a todo objetivo que tengas como bajar 10 kilos en 6 meses, aprender a tocar guitarra en 3 meses para armar un pequeño grupo musical, aumentar las ventas un 100% este año, meditar 20 minutos todos los días, comenzar una nueva empresa en 6 meses o aumentar 10 horas semanales lo que estamos junto a nuestros hijos.
Comienza, ten tus primeros pequeños éxitos y verás como aparecen la motivación, la perseverancia, el coraje, la creatividad, y por supuesto las fallas. Este es un proceso iterativo de aprendizaje continuo. Las lecciones aprendidas son claves para ir avanzando para conseguir tus sub-objetivos y avanzar en la consecución del gran objetivo o sueño.
El gran mal de personas, profesionales y emprendedores es tener un gran objetivo y cometer uno de dos errores, escalar antes de tiempo, perdiendo tiempo, esfuerzo y dinero innecesariamente o quedarse soñando despierto sin conseguir nada.
Comienza, crea realidad, consigue pequeños éxitos, construye motivación y perseverancia para no detener el ciclo de tu proceso o ritual.