Mediocre, Bueno o Extraordinario. ¿Dónde vives tú?
El trabajo diario ya sea en emprendimientos o empresas pasa por un sinnúmero de tareas, actividades y generación de resultados. Los profesionales hacen sus mejores esfuerzos para lograr lo que quieren conseguir.
Sin embargo, el resultado se enmarca irremediablemente dentro de una de las 3 categorías denominada MBE:
M: Personas que su trabajo genera resultados Mediocres
B: Personas que su trabajo genera resultados Buenos
E: Personas que su trabajo genera resultados Extraordinarios
Analicemos cada uno de ellos.
M: MEDIOCRE
El trabajo de profesionales muchas veces genera sostenidamente malos resultados. Eso está altamente relacionado con formas mediocres de gestionar y ejecutar. Lo vemos a diario con personas que no tienen sistemas organizados y disciplinas estructuradas.
Estas personas pierden mucho tiempo en reuniones innecesarias, haciendo tareas que no conducen a nada y terminan el día sin nada de valor real.
Muchas veces se sienten avanzando sólo porque hacen cosas que producen la ilusión de avance. Al final se mueven mucho pero hacen muy poco.
Estas personas por lo general viven vidas muy poco productivas, poco significativas y con niveles bajos de felicidad.
Estos profesionales se en encuentran en todos los niveles y puestos de trabajo de las organizaciones.
B: BUENO
Los buenos han logrado ser personas que hace muy bien lo que se le pide o se han propuesto hacer, pero sin salirse del esquema establecido.
Los resultados son buenos y consiguen lo que se espera de ellas y ellos y sus equipos. Viven de acuerdo a rígidas descripciones de cargos y muchos se sientes felices de cumplir sus tareas y metas con eficiencia.
Son personas que no les gusta salir de la zona de confort y si lo hacen vuelven rápidamente a estados cómodos.
Este tipo de trabajo es muy necesario para conseguir resultados en las empresas y organizaciones y es el que permite que la eficiencia se mantenga alta y las cosas típicas sucedan. Pero muchas veces a costa de trabajo muy repetitivo y muy confortable. Comúnmente estas personas son arrastradas desde la familiaridad y certeza de la comodidad al aburrimiento y la ansiedad, donde la confianza comienza a mermar sus vidas. La llegada del viernes por la tarde, para escapar de los que nos les gusta, es una típica característica de este tipo de profesionales.
Muchos se acostumbran a la obligación de generar el dinero para mantener sus familias lo que los hace vivir el status quo con cierto pensamiento que algún día todo cambiará.
E: EXTRAORDINARIO
En este caso los profesionales sobrepasan los límites establecidos de lo que se espera de ellas y ellos consiguiendo cosas notables mucho más allá de lo esperado.
En este caso el profesional sorprende por hacer algo fuera de lo común que va más allá del status quo imperante. Sostenidamente hacen la diferencia e impactan positivamente.
Ellos saben sumar a lo bueno y eficiente trabajo que crea cambio significativo para bien de ellos, sus equipos, clientes y empresas.
Muchas veces estas personas redefinen ellas mismas sus roles dentro de los emprendimientos y empresas y desafían en diferentes formas el status quo.
Normalmente cuando los ambientes no se dan para crear lo extraordinario arrancan y buscan nuevas empresas o crean las propias.
Son los extraordinarios los que crean productos y servicios innovadores más allá de lo esperado. Ellos lideran con nuevas formas de hacer que las personas encuentren un significado y propósito en la vida y ayudan a que las empresas inventen el futuro antes de ser disrumpidas por otras.
Ellos trabajan buscando salir de su zona de confort donde lo aprovechan para hacer lo fabuloso. Es aquí donde se sienten desafiados y encuentran formas de marcar la diferencia y crear novedad.
Los extraordinarios toman riesgos y gestionan la incertidumbre experimentando sucesivamente. Saben vivir con momentos de miedo y estrés, que al final son el motor para avanzar más allá.
¿Qué porcentaje del tiempo eres Mediocre, Bueno o Extraordinario?